ANTONIO ALBA MORATILLA
Asturias es tierra de montañas y de costas, y el agua un elemento conductor y vivificante que la caracteriza por sus cuatro costados. Entre los innumerables picos, brañas y valles del Principado podemos encontrar más de 300 lagos, lagunas y charcas. Algunos son tan conocidos y emblemáticos como los lagos de Covadonga; ninguno destaca por sus dimensiones, si lo comparamos con otras grandes masas de agua continentales, pero gran parte de ellos sobresalen por su particular belleza, por el excepcional entrono en el que se ubican. Esta guía, fruto de una incontenible pasión por las montañas y el territorio asturiano, nos conduce con precisión a través de 20 rutas hasta un conjunto de 45 lagos y lagunas, aportándonos también información en un extremo final sobre otros 39 destinos. Cada ruta está descrita con sus vías de acceso, cartografía, perfil y cuadro MIDE que nos informa del tipo de itinerario, distancia, desniveles y dificultad. Hay rutas más cortas y sencillas y otras pensadas para grandes caminantes. Todas tienen algo en común, conducen a preciosos lugares y paisajes de la geografía asturiana.